OFRENDA

Es esta anécdota en la que basó mi proyecto; partiendo de la experiencia personal en la pérdida de mi hermana por parte de fenómenos sociales latentes, represento por medio de retratos fotográficos, el periodo del 27 de julio del 2012 hasta el 13 de noviembre del mismo año, donde la desaparición y ausencia de un ser cercano marcaron tanto a nivel físico como mental a los miembros de mi familia.

“No puedes quitarte la vida Dora, ya que, si mueres, sería como ver a Andrea a través de un vidrio, pero sin poder tocarla, olerla, verle o hablarle. Sería como si ella no supiera que estás ahí”.